Katana 76 - Capitulo 5. La caza

Kilan corría hacia el bosque por las calles de la aldea para evitar daños colaterales, desviando los disparos de su persecutor lejos de las frágiles estructuras que los rodeaban.

"¿¡Es que estas loco!? ¡Vas a acabar matando a alguien si sigues pulsando el gatillo así!"
"Tranquilo, mientras no te muevas ninguno de los disparos le dará a nadie... Bueno ¡nadie excepto a ti claro está!"

El inusual cetro del ángel se abrió por encima del mango, recargando energía de su alrededor y disparando un muy bonito proyectil rosa y dorado hacia su presa.

"¡Joder!"

La presa, con un golpe veloz de su aún enfundada katana, lanzó hacia el cielo el ataque, donde explotó de forma tan bella como su anterior aspecto.

"Vamos, Shikata... ¿No eras tu el que decía que debería cuidar mi lenguaje?"

Tras convertir su replica en un chasquido de su lengua la presa prosiguió su huida, adentrándose en el bosque.

"Oh venga ya, ¿me esperas en el portal solo para huir? ¿Qué pasa, tantas ganas tenias de jugar al pilla-pilla, ESCAMADO DE MIERDA?"

Con una macabra sonrisa, el ángel continuó con su cacería.

Mientras tanto, en una casa ya familiar a esta historia, otra ángel dejaba ver sus preocupaciones.

"¿No deberíamos ceñirnos a su plan? Lo tenia todo bien planteado..."
"Tranquila, seguro que tuvo esto en cuenta cuando ideó su plan."
"Aun así..."

La conversación fue interrumpida por el sonido de una violenta apertura de puerta.

"¡Ha llegado alguien peligroso, Kilan me ha dicho que ya es la hora!"
"Vamos al portal."
"Mana... ¿Estas segura de que esto funcionará?"
"Puede que no funcione, pero no puedo huir sola y dejar al resto de la aldea a su suerte..."
"¿Eh.. de que estáis..?"
"Tu tranquila cariño, no dejaré que ninguna de vosotras sufra."

Las tres salieron de la casa, pero demasiado ligeras de equipaje como para ir de viaje.

"¿No deberíamos coger las cosas importantes al menos?"
"Bueno... Tu madre tiene un plan un tanto... único..."
"Ah si, Kilan me pidió que te devolviera las vendas y te diera las gracias de su parte."
"¿..Ehh..? Pero si ya me dio las gracias el antes... y tampoco hacia falta que me devolviera las vendas..."

Las dos mas jóvenes del trio se pararon, confusas, mirándose como si fueran la una un espejo de la otra.

"No me digas que..."

La chica miró hacia atrás, hacia el bosque donde las explosiones indicaban que pelea continuaba.

Un proyectil impactó contra uno de los múltiples arboles del bosque, que lo absorbió y dispersó a través de sus ramas, casi impactando contra el lanzador original.

"Jo-der, ¿pero de que coño están hechos estos arboles?"

Este bosque estaba rodeado por un campo de batalla, la tierra estuviera muerta, el aire quemado y recibir ataques perdidos era lo común. Estos arboles, cuya madera podía incluso ser usada para forjar armas, desarrollaron la capacidad de absorber la magia del ambiente de manera agresiva y dispersar después una parte con los arboles cercanos.

"Esa chica que estaba contigo era su hermana ¿no? Y las vendas que llevaba en los brazos las habrá hecho esa tal Feliziel, normal que te hayas regenerado tan rápido... Parece que has conseguido ganarte a su familia antes de que sepan la verdad."

El cazador provocaba a su presa para que saliera de su escondite, y parece que funcionó.

"Ya saben la verdad, se lo he contado todo, y te lo puedo contar a ti también si-"
"JAJAJAJAJA... ¿¡Te crees que soy imbécil, que voy a escuchar una sola palabra que salga de tu boca!?"

El ángel disparó el sitio del que hace unos segundos había venido la voz de su presa, pero esta ya había cambiado su escondrijo.

"¡Siempre haces lo mismo, te aprovechas de tu maldición para que la gente baje la guardia y te las ingenias para manipularles!"
"¡No las he engañado! He sido totalmente sincero con ellas, y también lo seré contigo si dejas de dispararme..."
"¡NI LO SUEÑES!"

El cazador disparó a un árbol, y este redirigió su ataque a Kilan, pero este lo esquivó.
Mientras el cetro del ángel recargaba el dragón blanco se expuso a si mismo, cogiendo su katana por la vaina y con el mango hacia arriba. Con un brillo en su dedo, lo deslizó por la punta del mango y dibujó lo que parecía una línea errática en el aire.

"Veo que te has dejado de jueguecitos... ¡PUES TOMA ESTO CAPULLO!"

El disparo del ángel era mucho mas veloz que antes, pero su objetivo lo interceptó con el mango de su arma y lo devolvió por la punta de su vaina, rozando la cabeza de su agresor.
El ángel comenzó a reírse incontrolablemente, tapándose la cara con su mano mientras arqueaba su cuerpo hacia atrás.

"Así que vas a usar tu espada como un cetro... ¡Entonces tendré que usar yo mi cetro como espada!"

Con la misma luz Kilan usó hace un momento inscribió una linea en su cetro, cuando terminó la línea se disipó en el aire como si nunca hubiera existido, su cetro se estiró y de la punta hacia el mango nació una hoja de energía.

Tras la transformación el ángel corrió hacia su presa, y una vez se encontraba lo suficientemente cerca dio un salto decidido a dibujó una línea curva desde el cielo hasta su núcleo, pero el dragón blanco lo paró antes de alcanzara su pelo blanco usando tan solo la superficie de la punta de su vaina.

Ambos adoptaron posiciones de combate y empezaron a andar lentamente en círculos, como si gravitaran el punto exacto donde chocaban sus miradas.

"No te veo muy en forma Shikata, quizás deberías haberte dejado las vendas un rato mas... ¿Qué pasa, estabas empezando a sentir el peso de la culpa?"
"..."
"Si el sellado hubiera afectado también a la vaina y el mango esto habría acabado mucho mas rápido"
"Por favor, para ya con esto, no quiero hacerte daño..."

Desprecio fluyó en la cara del ángel justo antes de apretar con fuerza su cetro, aumentando el tamaño de su hoja.

"Seguro que tampoco querías hacerle daño a Kanan ¿verdad?"

El resentimiento en la cara del dragón era obvio, y su enemigo no tardó en aprovecharse. El ángel avanzó atacando el flanco de su enemigo con fuerza, el cual aun habiendo conseguido bloquearlo salió despedido contra uno de los duros arboles que los rodeaban.

"Amikael... sabes que esto no es lo que lo que Kanan habría querido..."
"Si, eso desde luego... Tienes razón... ¡Lo que el habría querido es seguir vivo!"

Kilan solo podía agachar su mirada, lo cual solo irritó aun mas al ángel.

"... Si tanto te arrepientes... ¡PAGA CON TU VIDA TRAIDOR DE MIERDA!"

El tajo cortó justo donde el cuello de su presa debería haber estado, pero lo único que cortó fue al árbol, haciendo que su larga vida terminara y su aun mas largo cuerpo chocara contra el suelo, agitando todo el bosque.
Kilan, que había aprovechado la cegadora furia de su adversario, se encontraba ahora a una distancia segura de su espalda.

"Sois vosotros... los que os unisteis al plan contra el que el luchó a costa de su vida..."
"JAJAJAJAJA... Tiene gracia que tengas los huevos de decir eso a la cara después de lo que hiciste..."

Sus palabras llegaron a los mas profundo del ángel, pero lo que mas alimentaba su mirada asesina era que sabia que su presa creía en lo que decía.

"Ni tu ni Kanan entendíais lo dura que es esta guerra, tuvisteis la suerte de no pisar un campo de batalla... ¡NO TENIAIS NI PUTA IDEA! ¿Qué coño importan unas cuantas vidas inocentes a cambio de la paz en todo el Kosmos? ¡NADA, ESO ES LO QUE IMPORTAN! Los soldados nos matamos entre nosotros para mantener la seguridad de nuestra facción, pero para eso tenemos que causar desgracia a otros... Ganemos o perdamos solo creamos el sufrimiento de unos a cambio de que la indiferencia de otros pueda continuar, matando los mundos por los que estamos luchando en el proceso...
¿Por que no lo entendisteis? Si no hubierais empezado una rebelión, diciendo que tenia que haber otra forma de hacer las cosas... Si hubierais confiado en nuestro sufrimiento y os hubierais rendido en vez de luchar hasta el final... estaríamos todos juntos ahora..."

La hoja de energía desapareció en el aire, y las pequeñas partículas de luz que flotaron y chocaron con la cara del ángel se convirtieron en lagrimas...

"Amikael..."

El dragón bajó su arma y se acercó a su amigo, que le alejó con el brazo y le apuntó con su espada aún sin encender.

"¡NO TE ME ACERQUES!"



Rikan corría lo mas rápido que su 'maldita pierna' le permitía, siguiendo los indicios de la batalla justo cuando escuchó un grito, parece que para seguir tendría que salir del camino.

"¡VAMOS DÍLO, QUIÉRO OÍRLO DE TU VOZ!"

Los gritos se oían mas fuerte con cada paso, pero uno de esos pasos pisó en algo que la pisadora no esperaba pisar.

"Esta no es... mi espada? Que rápido se recorre el camino cuando no llueve y puedes ver donde pisas..."

Espada en mano, continuó su pisar, y al poco vio a su antiguo compañero de árbol acorralado contra uno, siendo apuntado por el ángel con su cetro, y como era común con la chica cuando veía a alguien que necesitaba ayuda, actuó sin pensárselo mucho.

"TOMA ESTO CAPULLO"

La chica se lanzó contra el ángel, apuntándole con su espada.

"¡NOOO!"

La espada se clavó contra su hombro, mientras que un disparo del cetro del ángel, que había reaccionado demasiado tarde chocaba contra su espalda.

"Que ha... Q-Que he..."

La chica, que aún sostenía la espada que atravesaba el hombre de Kilan, se callo al suelo cuando este se callo sobre ella.

"¿¡Por qué lo salvas!? ¡El es uno de los que mató a mi hermano! ¿No?"

Tras emitir su dolor con un sonido inescrbible, Kilan agarró a Rikan y corrió hacia un lugar seguro.
Amikael, mientras tanto, comenzó a reírse levantándose del duro suelo.

"¿Yo? ¿Matar a tu hermano? No me hagas reír. Oye, ¿no decías que les habías dicho toda la verdad?"
"¿¡De que coño hablas!?"
"El asesino de tu hermano es el mismo al que acabas de apuñalar, felicidades."
"¡Déjate de gilipolleces, Kilan nunca mataría a mi hermano!"

Kilan dejó de correr...

"...¿Verdad...
                   ...Kilan..?"

Rikan se soltó y dio un paso atrás.

"Kilan... solo tienes que decir que no lo hiciste y..."
"..."
"Kilan... 
                di que... 
    no..."

El miedo se apoderó poco a poco de su cara mientras daba otro paso hacia atrás.
Kilan la miró, sus ojos ocultos en la sombra de su pelo blanco.

"Kanan y yo éramos los dos únicos en la habitación cuando el murió."
"...Pero eso no...     ...significa que...     ...fueras..."
"La vida de Kanan fue terminada por esta su antigua katana, que ahora empuño yo  y  que empuñaba en el momento de su muerte."

Rikan dio otro paso hacia atrás... tropezando con una raíz... cayendo de lleno en el suelo...
Kilan agarró al hoja de la espada envainada aun en su hombro y la arrancó. La tiró, aun cubierta de sangre, justo en frente de la chica, provocando que saliera un pequeño trozo de grito que no pudo contener.

"En el momento de su muerte... la hoja de esta katana atravesaba el cuello de tu hermano."

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